Hoy día Tinder se ha convertido en una poderosa y controvertida herramienta, no descubrimos nada nuevo. Pero ¿Cómo afecta el uso de Tinder y otras aplicaciones en nuestro bienestar?
Citando este interesante articulo: (Her, Y. C., & Timmermans, E. (2020).)
Llegan a la conclusión de que puede presentar aspectos positivos y negativos. Resumiéndolo, se llega a 3 conclusiones
- Tu bienestar puede decrecer si buscas una relación de pareja y tienes una tendencia a compararte con otros. Aumentará la ansiedad y la tristeza.
- En cambio, si tienes éxito en Tinder, se incrementa el sentimiento de alegría y decrece la tristeza y la ansiedad.
- Tinder no es la mejor opción si buscas una relación de pareja y no algo a corto plazo.
Si estas leyendo esto pensaras que no descubren nada nuevo y con razón, si te va bien estarás contento y viceversa. Además, hoy día la existe la tendencia a buscar otras vías, por ejemplo, Instagram.
Y ojo, que según otros dos estudios, un tercio de quienes usan aplicaciones online no llega a quedar en la realidad. (Smith & Anderson, Citation2016»; Timmermans & Courtois, Citation2018»)
La calidad y tipo de relaciones que surgen de Tinder no difieren tanto de las relaciones tradicionales, sin embargo, ello no quita que la Tinderizacion de las relaciones haya conducido a un uso “instrumental o utilitario de las relaciones” es decir, donde prima lo que quiero de ti. (Tratando a los demás como objetos para satisfacer mis necesidades o deseos.)
Esto tiene consecuencias, especialmente si tenemos dificultades para protegernos en las relaciones. Desde permitirnos decir que no, hasta acceder al sexo por evitar sentirnos rechazados, esperando una reciprocidad emocional que no se da.
El gran problema aparece cuando no logramos protegemos o en las situaciones en las que ignoramos el daño que nos hacemos. Pero después nos sentiremos regular o mal sin saber bien por qué.
Se habla de la responsabilidad afectiva como intento para paliar el utilitarismo del que hablábamos, pero la realidad para ambos sexos es que muchas veces se pide o exige al otro un respeto o cuidado, para descubrir posteriormente la ausencia real de dicho cuidado o respeto.
De ahí, la enorme importancia de aprender a relacionarnos de una forma sana, desde la empatía y el autocuidado. Evitando caer en dinámicas toxicas o si estamos dentro, poder salir cuanto antes.
Se puso de moda hablar de banderas rojas o “red flags” pero lo que se ve en redes no es más que una aproximación superficial, que no ahonda más allá. ¿Conoces a alguien que manifieste abiertamente que su mayor deseo sea sufrir dentro de una relación o que le hagan daño?
Aunque ayuda, solo por saberlo, no implica que vayamos a evitarlos, a veces es como si viéramos un árbol que cae sobre nuestras cabezas a cámara lenta lo vemos venir, pero algo en nosotros nos mantiene en el sitio.
¿Tal vez te identificas con esto que te cuento?
En general, no podemos esperar que los demás conozcan nuestras necesidades ni que sepan, quieran o puedan tenerlas en cuenta. Esto es independiente de la intención que no tiene por qué ser buena o mala. Como ejemplo sencillo, basta con que su interpretación de lo que ha de ser una relación o lo que pueda implicar un “rollo” sea diferente a la nuestra.
La responsabilidad de protegernos recae en nosotros, empezando por saber o entender como funcionamos en las relaciones.
Esto va desde preguntas un poco más sencillas de responder ¿Qué quiero? ¿Cómo lo quiero?
Hasta otras un poco más complejas como ¿Qué significa una relación para mí? Desde donde me estoy acercando a esa persona ¿hago las cosas por angustia, miedo o inquietud? ¿Qué significado tiene el rechazo en mi vida?
Cuando estoy en una relación ¿se me disparan emociones o sentimientos de angustia? ¿Necesito reconfirmar la presencia del vínculo, mediante preguntas o control del otro? Tengo arranques de ira, si siento que no me están teniendo en cuenta.
A modo de conclusión:
La búsqueda de afecto, o pertenencia, es uno de los motivadores más fuertes y satisfactorios que hay. Pero, si no entendemos que nos sucede al relacionarnos, nos estamos exponiendo a múltiples situaciones que nos pueden estar dañando o generando un malestar considerable.
Y esto es válido pase dentro o fuera de Tinder en cualquier otra aplicación o lugar de ligoteo, sea Mercadona o el bar de la esquina.
Bibliografía Apa
- Her, Y. C., & Timmermans, E. (2020). Tinder blue, mental flu? Exploring the associations between Tinder use and well-being. Information, Communication & Society, 24(9), 1303–1319. https://doi.org/10.1080/1369118X.2020.1764606»
- Timmermans, E., & Courtois, C. (2018). From swiping to casual sex and/or committed relationships: Exploring the experiences of Tinder users. The Information Society, 34(2), 59–70. https://doi.org/10.1080/01972243.2017.1414093»
- Smith, A., & Anderson, M. (2016, February 26). 5 facts about online dating. Pew Research Center. https://www.pewresearch.org/fact-tank/2016/02/29/5-facts-about-online-dating/»